«Aunque su razonamiento jurídico sea retorcido y poco sólido, es fundamental que tomemos en serio al juez Thomas y al movimiento extremista que lo respalda”
Antes de que el Tribunal Supremo de Estados Unidos anulara la sentencia del caso Roe contra Wade, los republicanos insistieron en que el precedente de 50 años que garantizaba el derecho al aborto era seguro. De hecho, lo decían incluso mientras tomaban medidas para anularlo.
“Creo que la probabilidad de que Roe contra Wade sea anulado es mínima. No creo que eso llegue a ocurrir”, dijo la senadora republicana Joni Ernst en septiembre de 2020, antes de que se confirmara la elección de la jueza conservadora del Tribunal Supremo Amy Coney Barrett.
Ahora, los republicanos vuelven a restar importancia a la amenaza de otros derechos establecidos por el Tribunal Supremo, como la protección de la anticoncepción y el matrimonio homosexual.
“No creo que sea un problema real. Creo que los demócratas se lo están inventando”, dijo el martes a la edición estadounidense del HuffPost el líder republicano de la minoría en el Senado, John Thune, al ser preguntado por los esfuerzos demócratas para proteger ambos derechos a través de la legislación. “Creo que todo esto es un teatro”.
″¿Cuál es la amenaza? ¿Por qué no responden a los problemas que de verdad preocupan a la gente?”, dijo el senador republicano Marco Rubio, señalando el alto precio de los alimentos y la gasolina.
La Cámara de Representantes aprobó el martes un proyecto de ley que derogaría la Ley de Defensa del Matrimonio y codificaría de forma específica la protección para la igualdad matrimonial y la anticoncepción en la legislación federal. Los demócratas citaron la concurrencia del juez del Tribunal Supremo Clarence Thomas en la sentencia que anuló Roe como razón para intentar aprobar estas leyes ahora mientras esas protecciones siguen siendo un precedente, algo que no hicieron con el aborto.
“Creo que los demócratas se lo están inventando. Esto es un teatro”
– John Thune, líder republicano de la minoría en el Senado
El juez del Supremo Clarence Thomas escribió que los jueces deberían reconsiderar específicamente los casos que protegen el acceso a la anticoncepción y las relaciones entre personas del mismo sexo, ya que también se basan en el derecho a la privacidad.
“No se equivoquen: aunque su razonamiento jurídico sea retorcido y poco sólido, es fundamental que tomemos en serio al juez Thomas y al movimiento extremista que lo respalda”, dijo la presidenta demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, en un discurso pronunciado el martes.
Thomas fue el único de los jueces que instó al Tribunal Supremo a reexaminar esos derechos, pero no es el único conservador que promueve que lo hagan.
Durante el fin de semana, el senador republicano Ted Cruz dijo que el Tribunal Supremo “se extralimitó” y “se equivocó claramente” cuando legalizó el matrimonio entre personas del mismo sexo en todo el país en la histórica decisión de 2015 del caso Obergefell contra Hodges. Otros senadores republicanos, como John Cornyn (Texas) y Marsha Blackburn (Tennessee), han expresado opiniones similares.
El apoyo al matrimonio entre personas del mismo sexo ha aumentado constantemente en las últimas dos décadas, incluso entre los republicanos. El mes pasado, una encuesta del Pew Research reveló que el 71% de los estadounidenses cree que debería ser legal.
En los últimos años, el Partido Republicano ha dejado de lado las guerras culturales en torno al matrimonio entre personas del mismo sexo para centrarse en temas como la llamada teoría racial crítica y los debates sobre la identidad de género en las escuelas. Un puñado de republicanos del Senado apoyan públicamente el matrimonio entre personas del mismo sexo, como Rob Portman (Ohio), Susan Collins (Maine) y Lisa Murkowksi (Alaska). Y 47 republicanos de la Cámara de Representantes votaron el martes a favor de proteger el matrimonio homosexual, lo que sugiere que algunos de sus homólogos en el Senado podrían seguir su ejemplo.
Pero no está claro si al menos 10 republicanos votarían a favor de un proyecto de ley para codificar la igualdad matrimonial si se sometiera a votación en el Senado. La mayoría de los senadores del Partido Republicano calificaron el martes la legislación de innecesaria y la desecharon como una forma de propaganda de los demócratas de cara a las elecciones midterm de noviembre.
“Aparte del juez Thomas, no he oído a ningún otro juez insinuar nada [contra el matrimonio homosexual]”, dijo el martes el senador republicano Kevin Cramer.
Y añadió: “No apoyaría la ley si llegara al Senado”.
El senador republicano James Lankford ha acusado a los demócratas de “incendiar a sus bases” sacando a relucir una legislación innecesaria para abordar cuestiones “objetivamente falsas”.
“Tenemos más prioridades que tiempo”
– Dick Durbin, jefe demócrata de la mayoría del Senado
El líder republicano de la minoría del Senado, Mitch McConnell, que a menudo tiene un gran peso en los proyectos de ley que pasan por la Cámara, se negó a posicionarse en el asunto.
“Voy a retrasar el anuncio de cualquier posición sobre ese tema hasta que veamos lo que el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, decide poner sobre la mesa”, dijo McConnell.
No está claro si los demócratas tendrán tiempo suficiente para someter la legislación a votación en el Pleno. Los demócratas se están apresurando para aprobar este verano proyectos de ley para impulsar la industria de los semiconductores y reducir el coste de los medicamentos de prescripción médica y las primas de los seguros médicos. Algunos defensores del clima quieren que el Senado tome medidas de verdad para abordar la crisis climática. Y los demócratas tienen la presión de elegir más jueces antes de que termine el año.
“Tenemos más prioridades que tiempo”, resumió Dick Durbin, jefe demócrata de la mayoría del Senado, ante los periodistas el martes.
El cierre de agosto del Senado, que dura un mes, y la proximidad de las elecciones midterm de noviembre no hacen sino agravar la situación de los demócratas. Algunos demócratas ya están presionando para que se acorte el receso, pero Durbin señaló el martes que se necesita un apoyo de 50 senadores demócratas para lograrlo.
Este artículo fue publicado originalmente en el ‘HuffPost’ Estados Unidos y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.