El Senado del estado de Florida aprobó este jueves un proyecto de ley que prohibiría la mayoría de los abortos después de las 15 semanas de embarazo, permitiendo solo excepciones que impliquen “riesgo grave” para la persona embarazada y anormalidad fetal fatal, pero sin excepciones por violación o incesto.
El proyecto de ley patrocinado por el Partido Republicano fue aprobado por la Cámara de Representantes del estado el mes pasado e irá al gobernador Ron DeSantis, un republicano que previamente ha señalado su apoyo a los legisladores para restringir el acceso al aborto.
Florida se une a Virginia Occidental y Arizona como estados liderados por conservadores que avanzan en esta sesión un proyecto de ley que prohíbe el aborto a las 15 semanas, mientras la Corte Suprema de EE.UU. parece lista para defender una ley similar de Mississippi que prohíbe el aborto después de las 15 semanas.
El destino de Roe v. Wade, la histórica decisión de la Corte Suprema de 1973 que legalizó el aborto en todo el país, también está en juego, y los activistas contra el aborto tienen la esperanza de que la mayoría conservadora de la corte la anule.
La ley de Florida actualmente prohíbe los abortos en el tercer trimestre. Permite excepciones si el procedimiento es necesario para salvar la vida de la mujer embarazada o evitar un «riesgo grave de deterioro físico sustancial e irreversible inminente» para una mujer embarazada.
El proyecto de ley aprobado por ambas cámaras mantendría esas exenciones y agregaría otra: si el feto tiene una anomalía fatal.
Las más de una docena de enmiendas propuestas por los demócratas, incluida una que proporcionaría una excepción para la violación y el incesto, fracasaron.
Los senadores votaron siguiendo las líneas del partido 23-15 a favor del proyecto de ley, que, si DeSantis la promulga, entraría en vigencia el 1 de julio.
Los demócratas que se oponen a la medida se apresuraron a expresar su oposición este jueves por la noche, y los miembros de la Cámara del partido dijeron en un comunicado que era «un ataque directo a la gente de Florida y nuestros derechos constitucionales».
La alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, dijo en las redes sociales que la medida haría retroceder una dignidad básica para las mujeres.
“Más preocupante es rechazar las excepciones por violación e incesto, incluso para niñas jóvenes. El aborto es una decisión profundamente personal, y silenciar esa decisión es indignante e incorrecto”, dijo.