COMUNICADO
El Movimiento Unión y Progreso considera una burla los anuncios realizados ayer por el presidente Nicolás Maduro en el contexto del Día Internacional de los Trabajadores. Dichos anuncios son una grosera desconsideración a la situación de necesidad y extremos padecimientos a los que se encuentran sometidos los trabajadores Venezolanos.
Las expectativas de mejora sustancial a los padecimientos de hambre, salud y sobrevivencia, de los sectores asalariados estaban centradas en el anuncio gubernamental que nivelara el salario real, frente a la crisis económica que padece el país. Los sectores laborales demandaban un aumento salarial que permitiera rescatar de manera sensible y progresiva su capacidad adquisitiva y calidad de vida, que vienen siendo progresivamente menguados en grado extremo al percibir un ingreso mensual de menos de 6 dólares.
Quien se autodenomina «presidente obrero» ha actuado como el más insensible y cruel de los explotadores al negarse a otorgar el aumento del salario mínimo y prevarica el ingreso al bonificarlo, cosa que en el pasado los propios voceros del chavismo habían demonizado.
Un incremento pírrico en el bono de alimentación y el denominado » bono de guerra» sin incidencia salarial ni prestacional, echa por tierra las expectativas generadas en torno al tradicional aumento del salario mínimo con ocasión del 1 de mayo y coloca al régimen de Nicolás Maduro como el más empobrecedor y anti obrero de la historia venezolana.
EL Movimiento Unión y Progreso, acompaña a los trabajadores en sus reclamos, rechaza el escamoteo consagrado a los legítimos derechos de la clase obrera venezolana y exhorta a los sectores laborales a no desmayar en su protesta legítima y democrática, a incrementar su capacidad de movilización para obligar al gobierno a rectificar en su política anti obrera al someter a grandes padecimientos a la inmensa mayoría de los Venezolanos.
El argumento de la falta de recursos, o el atribuir a las sanciones internacionales sus carencias, se cae por su propio peso al confrontarla con la continuada corrupción de sus funcionarios en el manejo de los dineros de la nación.
Son 23 años de corruptela, los cuales según confesión de sus propios voceros oficiales, se han esfumado más de tres mil millones de dólares que bien hubieran servido para dotar de un salario decente a los trabajadores venezolanos así como dotar de servicios de salud y asistencia social entre otros a los trabajadores en Venezuela.
Caracas, 3 de mayo de 2023.